La protección de los niños es una de las mayores prioridades de la Espada del Espíritu. Creemos que Dios nos ha llamado a ser una comunidad intergeneracional y que crear ambientes que sean seguros y promuevan a nuestros niños y jóvenes es nuestra responsabilidad en las actividades y programas de la Espada del Espíritu.

Dentro de la Espada del Espíritu, todos los programas para niños y jóvenes se ejecutan por medio de las regiones o las comunidades locales. Por esa razón solicitamos que cada región y cada comunidad local en la Espada del Espíritu tenga una Política de Protección Infantil para servir y proteger a nuestros niños. Estas políticas ayudan a nuestros colaboradores y voluntarios a poner en práctica el compromiso de la Espada del Espíritu a proteger el bienestar de los niños y jóvenes.

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Marco para la protección infantil

  1. Proteger la seguridad y el desarrollo emocional, físico y espiritual de los niños es una prioridad absoluta para nuestra vida y misión en la Espada del Espíritu.
  2. En consecuencia, cada comunidad En Camino B y Miembro Pleno de la Espada del Espíritu debe tener establecida y funcionando una Política de Protección Infantil (PPI). Estas políticas deben cumplir con los requisitos legales y sociales del país en donde se encuentre localizada la comunidad, así como la práctica de la Iglesia local.
  3. En todos estos asuntos, nuestra principal preocupación será el bienestar de nuestros niños y jóvenes y garantizar que se haga justicia.
  1. Las PPI’s deberán abarcar a todos los niños y jóvenes involucrados en actividades comunitarias hasta la mayoría de edad legal en el país en donde se encuentre localizada la comunidad. Se incluyen los invitados que no son miembros. Esto es, la PPI protegerá a los niños de las familias de la comunidad, así como los niños involucrados en programas o eventos de la comunidad.
  2. Las PPI’s abarcarán tanto nuestros programas formales, como los contactos individuales más informales que puedan presentarse (Ej. entrevistas individuales con quienes trabajan con jóvenes). Algunas disposiciones también se aplican para manejar problemas que puedan surgir dentro de las familias u otros contextos.
  3. Las PPI’s pueden utilizar políticas y enfoques diferentes para las diferentes edades de niños y jóvenes.
  4. Las regiones serán responsables de desarrollar PPI’s para el trabajo regional con la juventud.

Se recomienda que cada PPI incluya disposiciones para cubrir los siguientes asuntos:

  1. Un procedimiento de aprobación para garantizar que quienes trabajan con nuestros niños y jóvenes son idóneos. ” Esto puede incluir verificación de antecedentes y tiempo de membresía obligatorio, antes de trabajar con nuestros niños y jóvenes (ej. ser miembro por lo menos 12 meses)
  2. Disposiciones para la supervisión que no permitan que los adultos estén solos con niños o jóvenes en la conducción normal de actividades y programas. ” Esto se conoce comúnmente como la ‘regla de dos adultos’ la cual requiere que normalmente estén presentes 2 adultos en cualquier programa que involucre a los niños, especialmente en actividades nocturnas, actividades en casas, salones de clase cerrados u otras ubicaciones privadas.
  3. Disposiciones para que a los jóvenes no se les permita enseñar/cuidar a niños sin la supervisión y la presencia de un adulto.
  4. Limitar la disciplina física que se puede utilizar en el cuidado de niños o jóvenes.
    ” Normalmente esto debería ser establecido como ‘No se permite utilizar ningún tipo disciplina física a quienes trabajan con niños y jóvenes’.
  5. Establecer con claridad para quienes trabajan con nuestros niños y jóvenes, cuáles son las expresiones de afecto y tocamiento apropiados. Especialmente, se debe señalar como inapropiado cualquier contacto físico de naturaleza sexual o que pudiera ser interpretado como de naturaleza sexual. ” Esto variará de acuerdo a las realidades culturales que tenemos en la Espada del Espíritu, pero se deben considerar y describir para prevenir cualquier contacto físico inapropiado.
  6. Protocolos de comunicación con los padres acerca de los programas de niños y jóvenes, especialmente cuando están involucradas actividades nocturnas.
  1. El liderazgo comunitario se asegurará que todos aquellos que están trabajando con niños y jóvenes recibirán entrenamiento en la PPI comunitaria.
  2. La frecuencia del entrenamiento o evaluación del entrenamiento no puede ser menos que anual.
  3. El entrenamiento para los coordinadores y responsables mayores incluirá de manera obligatoria, entrenamiento en la PPI y los protocolos de comunicación y recurso a instancias superiores (ver abajo).
  4. Comprender el fundamento y propósito de la protección infantil será incluido en el programa de capacitación de liderazgo de la Espada del Espíritu.
  1. Cada PPI incluirá mecanismos de comunicación y recurso a instancias superiores que cumplan con los requerimientos legales del país en donde esté localizada la comunidad. Estos mecanismos deben incluir informar a las autoridades legales cuando sea aplicable.
  2. Adicionalmente, en cualquier caso en el que se sospeche abuso de niños o jóvenes dentro de la comunidad, ya sea en un programa/actividad o en una familia u otro entorno, deben ser notificados de esta inquietud, tanto el Coordinador Externo de la comunidad como el Presidente Regional, y ambos deberán estar comprometidos en el proceso de responder a esta inquietud. ” Comentario: Esta disposición es para garantizar que las comunidades locales no son abandonadas a sus propios recursos cuando traten problemas de esta naturaleza. Es una protección y una provisión para lo que probablemente muchas de nuestras no tengan los conocimientos especializados adecuados para tratar con este problema y cuidar bien a todos los involucrados. También provee comunicación entre las comunidades en las situaciones en donde quienes trabajan con jóvenes o familias se mudan a otras comunidades.
  3. Más aún, se recomienda fuertemente que las líderes mujeres adecuadas participen en el proceso pastoral de lidiar con cualquier caso de sospecha de abuso desde el inicio.
  1. Los coordinadores de cada comunidad son finalmente responsables de garantizar que la PPI esté establecida y funcionando en su comunidad.
  2. El Presidente Regional es responsable de garantizar que cada comunidad en su región tiene una PPI establecida y también será responsable de garantizar que cualquier caso de abuso sea manejado de manera apropiada. Puede asignar un Oficial de Protección Infantil para la región que le ayude con estos deberes, pero él retiene la responsabilidad final. También puede identificar en la región, expertos en la materia que le ayuden y puede reclutar otros líderes que le ayuden en asuntos de juicio según sea apropiado.
  3. El Presidente Internacional es responsable de garantizar que el Cuadro de Protección Internacional sea aplicado en todas las regiones y servirá como autoridad final en cualquier tema de preocupación o donde se requiera un juicio. Puede recabar asesoramiento o consejo externos según se requiera.
  1. El desarrollo de una PPI será incorporado en el proceso de construcción de comunidades para las nuevas comunidades en su proceso de formación. La PPI debe estar completa y demostrar que esta funcionando bien, para que una comunidad se convierta en una comunidad formada (En Camino B) de la Espada del Espíritu.

Actualizaciones de salvaguarda

Declaración de Jean Barbara, Presidente de la Espada del Espíritu – 28 feb 2022

Declaración de Jean Barbara, Presidente de la Espada del Espíritu – 18 jul 2023

Informe de salvaguarda de Lathrop GPM y Respuesta del CEI – 16 ene 2024